Durante los días del 3, 4 y 5 de Octubre en Cámara de Comercio de Bogotá se llevó a cabo la VI Conferencia de RIBEI titulada IBEROAMÉRICA: LABERINTOS Y ALTERNATIVAS.
A lo largo de sus distintas sesiones se invitó a la reflexión sobre el lugar y el rol de América Latina, en la actualidad frente a este mundo cada vez más conectado y globalizado. También se hizo referencia a las transformaciones profundas que afectan todos los niveles y se materializan en las relaciones internacionales (Brexit, rechazo creciente a los mega tratados de libre comercio), en la política (ascenso de populismos xenófobos en Europa y EEUU), en la economía y en la vida cotidiana a partir de las profundas transformaciones tecnológicas que está aportando la realidad digital. En este contexto, el Director Ejecutivo de ASIET, Pablo Bello, fue convidado a participar como panelista durante el 4 de Octubre, en un panel sobre futuro digital y desafíos para el emprendimiento, la gobernanza y la ciudadanía. Junto a Pablo Bello, participaron Claudia Calvin, Directora General del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI) y Jorge Sahd K., Director del Centro de Estudios Internacionales P. Universidad Católica de Chile como moderador.
Durante su exposición, el Director de ASIET hizo una descripción de datos de América Latina y aseguró que ante estos datos, «Vivimos una verdadera Revolución Digital en América Latina. Ya sea por el número de usuarios, la cantidad de personas conectadas, o la evolución de los precios». Sobre el uso de las TIC en nuestra región, Bello declaró que “contribuyen significativamente al desarrollo económico y social de la nuestra región» y lo sostuvo mediante la enumeración de ciertos hechos como que «La infraestructura de telecomunicaciones es la mejor infraestructura que tenemos en la Región» aún así, el «53% de los latinoamericanos no usa internet y el 66% de los hogares en latinoamérica no tiene conexión». Ante la última declaración, mencionó que «Cerrar la Brecha Digital es un imperativo económico, pero también ético» y para esto el sector de las telcos “es estratégico para el desarrollo, ya que explica 0,5% del crecimiento económico de 1995-2012″. Advirtió que es un error “aspirar a tener las telecomunicaciones de Suiza, con un ARPU (el ARPU es la media o promedio de ingresos por usuario que obtiene, en un período, una compañía de servicios con amplia base de usuarios) similar al de África. Un estudio realizado por CEPAL con la Consultora Convergencia Latina titulado Desafio 2020, estimó q llegar a la conectividad de países desarrollados requiere 400.000 mill de inversión» para lo cual es necesario “generar un marco regulatorio en el que los actores de la cadena de valor tengan un régimen relativamente simétrico».
Bello mencionó que los Latinoamericanos «Tenemos dos desafíos, cerrar la Brecha Digital y desarrollar la Economía Digital latinoamericana; de los 100 sitios web más visitados por latinoamericanos, sólo 26 son locales. Estamos transfiriendo riqueza hacia el primer Mundo». Luego citó como ejemplo el hecho de que sobre el 80% de la economía digital mundial está basada en Estados Unidos. «Estamos usando plataformas foráneas que generan poco empleo en la región y producen muy poca tributación» completó. Luego hizo referencia a que “construir un mercado común de más de 500 millones de hispanohablantes cambiaría las dinámicas de la Economía Digital» Dicho lo cual, hizo referencia a que durante el ELAC que tuvo lugar en 2015 en México, se propuso tanto a la CEPAL como a SEGIB la iniciativa de un Mercado Único Digital latinoamericano, hecho que fue respaldado y hoy se está debatiendo para intentar llegar a acuerdos. Cerró el tema de Mercado Digital afirmando que “Con un Internet Industrial se gana eficiencia y competitividad a través del uso de las TIC en los procesos productivos”.
Por último, concluyó: «Deben ser prioridades el cierre de la Brecha Digital, el desarrollo de un Internet Industrial y el desarrollo de Ciudades Inteligentes».
La RIBEI es una red de naturaleza iberoamericana formada por 44 centros de investigación y think tanks altamente especializados en el estudio de las relaciones internacionales, originarios de 16 países de Iberoamérica. La Red establece un nuevo mecanismo de cooperación orientado al análisis y al debate del futuro de América Latina y de Iberoamérica en el mundo en su sentido más amplio y con perspectiva estratégica.