Carlos Magariños

Director de Estrategia Global y Asuntos Externos, Vrio
«Es clave el diálogo público-privado que genera ASIET para promover el crecimiento de la industria y favorecer el intercambio de conocimiento y de buenas prácticas internacionales»

¿Cómo observa la evolución de la Televisión por suscripción en las últimas décadas en América Latina? ¿Qué papel ven que ha jugado y que jugará este sector en la economía y la sociedad?

Seguimos las tendencias de los mercados de la región, Estados Unidos y Europa permanentemente. Estamos en un momento de transformación de la industria y de inclusión de nuevas tecnologías y, por otro lado, nuevas preferencias de los consumidores, que nos obligan a repensar modelos de negocio y oferta de valor distintas.

La pandemia por COVID-19 aceleró los tiempos. La revolución del contenido, el entretenimiento y transformación digital está dando forma al futuro de nuestro negocio. Es así como estamos en constante actualización de nuestra programación, trayendo siempre lo mejor del entretenimiento y deporte a nivel nacional e internacional.

Llegaremos también al momento en que se concentren y simplifiquen las ofertas de cara al cliente. Actualmente las posibilidades de consumir entretenimiento son múltiples, y requiere del esfuerzo del consumidor para encontrar y administrar un número importante de suscripciones para contar con todo lo que quiere ver.  Estará de nuestro lado, enfocarnos y encontrar una propuesta acorde a este nuevo contexto.

El rol que juega esta industria en la economía global es clave. Se estima que la contribución de la conectividad al aumento del producto interno bruto (PIB) mundial superó ya a la del comercio de mercancías, según cita en su último informe la Conferencia de las Naciones Unidas Sobre el Comercio y Desarrollo (Unctad).

No se trata de apreciaciones, se trata de estadísticas: la producción de las empresas de tecnología de información y comunicación (TIC) a nivel global ya superó el 6,5% del PIB mundial y hoy cientos de millones de personas tienen un empleo formal directo o indirecto en este sector medular de la actividad económica.

En cuanto al papel en la sociedad, y fundamentalmente el de VRIO, creemos firmemente que es el de mantener conectados y comunicados a nuestros clientes, sobre todo, para aquellos que hoy se encuentran en lugares alejados y con menos posibilidad de acceder a otros tipos de conectividad.

Un ejemplo claro de esta función es nuestro programa de sustentabilidad Escuela Plus que, mediante nuestra tecnología, la capacitación docente y los contenidos educativos vía satélite por DIRECTV, posibilita que se dicten clases con herramientas audiovisuales para reducir la brecha digital y con un gran impacto en el proceso de aprendizaje de los estudiantes. El programa utiliza la más moderna tecnología satelital y llega a casi 9.800 instituciones educativas de ocho países de América Latina, alcanzando a más de 110 mil docentes y más de 2 millones de estudiantes.

Nosotros vemos en VRIO mucho más que una empresa de entretenimiento. La consideramos una plataforma para movilizar información y conocimiento, los insumos esenciales con los que deseamos contribuir a formar las habilidades digitales que nuestros pueblos necesitan para competir en la economía moderna.

La evolución de nuevas tecnologías permitió la irrupción de nuevas formas de consumo audiovisual, ¿cuál es el estado actual de la regulación y qué aspectos se deberían modificar para asegurar un mercado innovador, equilibrado y en competencia?

Estamos ante un verdadero dilema. El escenario hoy está muy desequilibrado. La TV paga afronta regulaciones muy estrictas y las Over the Top (OTT) no. Esto genera una competencia asimétrica en la que entran en riesgo las enormes inversiones que hacemos quienes producimos contenidos y prestamos el servicio de televisión.

Claramente, no nos oponemos a nuevos ecosistemas y mucho menos a la tendencia de consumo sincrónico de los contenidos, solo sostenemos que debe haber reglas de juego justas, que no impulsen a un sector determinado en detrimento de otro. Si bien la tecnología avanza en forma vertiginosa, las OTT están operando hace ya varios años y sin regulaciones.

Nosotros estamos convencidos que es el momento de actualizar la regulación, justamente para no dañar a un sector de la industria audiovisual que genera cientos de miles de puestos de trabajo directos e indirectos en toda a América Latina, en las que operan empresas locales que generan recursos y reinversión en el lugar. Son los jugadores globales los que deben cumplir las reglas dado que operan en un sistema integral con ventajas de tamaño, capacidad y recursos.

Para tener un mercado innovador, equilibrado y en competencia es necesario que haya reglas y que las mismas se cumplan.

¿Cómo ven la afectación de la piratería y la distribución ilegal de contenidos en esta industria en la región?

En Latinoamérica el gran competidor de la TV Paga no son las plataformas legales sino la piratería de contenidos audiovisuales. Esto representa uno de los mayores desafíos que tiene el sector del entretenimiento. Hay que modernizar y hacer más efectiva la regulación para proteger de forma más adecuada la cadena de valor de la economía creativa.

La piratería afecta a toda la industria del entretenimiento, perjudicando a quienes han contribuido con su talento a la creación de contenidos y a quienes invierten para promover la cultura local y ofrecer entretenimiento, información y más.

Este flagelo viola los derechos de los ciudadanos y expone a las personas físicas y jurídicas, a las familias y a los hogares a enormes riesgos por la utilización indebida de los datos dentro de un sector cuyos fundamentos de origen y supervivencia son el delito.

La piratería no solo es una competencia desleal para quienes invierten y crean valor, es un ancla para las economías, provoca empleo informal, atenta contra la cultura del trabajo y genera desigualdad. Quienes comercian la piratería no pagan impuestos y eso reduce los márgenes de maniobra de los Estados para generar mejoras en infraestructura para el desarrollo, mejorar la educación, la salud y la seguridad de los ciudadanos.

Los recursos que se generan con la piratería retroalimentan un mercado delictivo integrado por otras ramas del crimen organizado como el contrabando, el tráfico de estupefacientes, la trata de personas y la evasión impositiva.

Combatir a la piratería es una de las principales demandas que tenemos como industria. Tenemos que trabajar todos juntos, gobiernos, operadores y usuarios para frenarla.

Ante la evolución de los hábitos de consumo de los usuarios, ¿cómo fue la adaptación de DirecTV en América Latina para ofrecer nuevos contenidos y nuevas formas de acceso?

Los nuevos hábitos de consumo y la demanda de los suscriptores, que eligen acceder al contenido donde y cuando quieren, generan que la industria evolucione hacia un modelo directo a cada consumidor para brindar una experiencia personalizada.

El consumo de contenidos de entretenimiento cambió notablemente y 2020 marcó un hito a raíz de la pandemia global producida por el COVID-19. Entre todos los usuarios de DIRECTV GO se registró un aumento de unos 40 minutos promedio en el tiempo en pantalla duplicando la cantidad de visitas en 2019.

DIRECTV GO es la respuesta a las necesidades y preferencias de los clientes que exigen personalización de contenidos y mayor flexibilidad para acceder a otras plataformas y programación premium desde un mismo lugar.

La plataforma es la forma en que innovamos y respondemos a la transformación de la industria como compañía, ofreciendo una solución completa al público que busca entretenimiento de calidad.

¿Cuáles son los planes de inversión e innovación en materia de distribución y contenidos de VRIO para DirecTV?

Trabajamos para seguir creciendo en toda la región, para conectar cada vez más hogares y así bridar la mejor experiencia de entretenimiento. Para ello, estamos enfocados en expandir nuestra fuerza de ventas, para estar disponibles donde el cliente nos necesite.

Invertimos para incorporar cada vez más contenido exclusivo, con foco en deportes, pero también con una amplia oferta de series, películas y documentales para que todos nuestros usuarios disfruten dónde y cuándo quieran del mejor contenido.

Somos una empresa cada vez más ágil para dar la respuesta adecuada a los cambios de una industria en permanente transformación, y ofreciendo propuestas comerciales acordes a cada segmento del mercado, así como también brindando el servicio de DIRECTV GO sin costo adicional a nuestros clientes.

Vrio, empresa líder en entretenimiento a nivel global, con marcas como DirecTV y Sky en América Latina, forma parte de la Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (ASIET). ¿Cuál es el valor para Vrio de formar parte de ASIET?

Ser parte de la Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones es muy importante: es el foro natural para discutir el estado de las telecomunicaciones y lo que viene por delante. Trabajamos en un continente en el que existen enormes desafíos, pero también grandes oportunidades. La transformación digital depende de todos: las empresas que invierten; los usuarios; y los reguladores. Por eso, es clave el diálogo público-privado que genera ASIET para promover el crecimiento de la industria y favorecer el intercambio de conocimiento y de buenas prácticas internacionales.